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La violencia en la pareja se puede manifestar en forma de insultos, gritos, golpes o el maltrato psicológico, pero hay otras formas de violencia, que además hoy en día es muy común y es la provocada por los móviles y la tecnología.

Espiar el móvil o el ordenador de tu pareja o incluso en casos más extremos pedirle que active la ubicación de su móvil para saber donde se encuentra en todo momento es una forma clara y evidente de violencia ejercida a través de la tecnología, alguien que se comporta así contigo no te quiere y no te respeta.

Hay estudios que manifiestan que un 29% de adolescentes y jóvenes reconocen haber padecido algún tipo de control excesivo por parte de sus parejas mediante el móvil. Este tipo de conductas no son en absoluto sanas y no se deben permitir.

ESET  (Compañía de ciberseguridad), ha catalogado este tipo de conductas como violencia de género (controlar los mensajes de la pareja, su facebook, su ordenador, llamadas telefónicas,etc).

Una forma de abuso y control ejercido sobre la pareja es exigirla que diga cuales son sus contraseñas de acceso a sus redes sociales o móvil o los enfados que muestran si no se les responde rápidamente a sus mensajes o llamadas. Están invadiendo la intimidad y el espacio de la persona, restándole libertad.

Según un estudio realizado por Amnistia Internacional, una de cada cinco mujeres dice haber sufrido acoso por medio de internet al menos una vez en la vida y una de cada tres manifiesta haber recibido amenazas físicas o sexuales.

Ante este tipo de situaciones las mujeres reaccionan sintiéndose inseguras , experimentando falta de confianza y autoestima.

Si estás atenta podrás percibir las señales que te pueden indicar que tu pareja no es la apropiada, si tu pareja actúa de la manera que se ha explicado anteriormente , es que no te quiere, el amor es respeto y esas conductas lo que pretenden es ejercer control sobre ti, que hagas lo que él quiere, que él dé el visto bueno a tus relaciones.

De este tipo de conductas se puede pasar a la agresión verbal o física.

 

Muchas veces debajo de estos comportamientos se esconde una persona insegura y con sentimiento de inferioridad, que necesita sentir que tiene el control , posiblemente te diga que actúa así porque te quiere y se preocupa por ti y no quiere que te pase nada malo ni que nadie te dañe, pero el primero que te está dañando es él. Eso no es amor.